La oración es esencial para nuestra vida cristiana. Al igual que necesito un plan diario de ejercicio físico y estructura, también necesito un estructurado plan diario para centrarme y contenerme responsable de ejercer y fortalecer mi vida espiritual mediante la oración.
Una estructura sencilla que utilizo es una combinación de la Lectio Divina y escrituras asignadas para la semana del Leccionario Común Revisado (LCR).
La lectio divina es una forma de oración contemplativa lento las Escrituras. En la Lectio Divina, Dios nos enseña a escuchar y a buscarlo y su voluntad para el mundo en quietud, silencio, y oración. A través de la contemplación de la Sagrada Escritura y la oración, Dios nos invita con ternura a más profundidad en su presencia y hacia afuera con preocupación por los demás en nuestras familias, nuestras iglesias, nuestras comunidades, y nuestro mundo. Cuando oramos por otros, nos arrodillamos a sus pies y silenciosamente lavamos sus vidas, sus inquietudes, y esperanzas con las aguas de oración intercesora.
Nuestra relación con Dios es tanto personal como comunitaria. Orando por otros proclamamos que estamos conectados el uno al otro y preocupados por sus bienestares espiritual y temporal como hijos mutuos de Dios.
El LCR sigue un ciclo de tres años de Escrituras asignadas para cada domingo y fiesta cristiana del Antiguo Testamento, los Salmos, las epístolas u otros escritos, y uno de los cuatro evangelios.
El uso del Leccionario como un foco para la oración nos permite escuchar las distintas voces y las enseñanzas de las Escrituras y nos libera del cautiverio de nuestros textos favoritos. Uso del Leccionario nos permite aprender de toda la Sagrada Escritura, nos invita a considerar cómo multifacética y rica es el mensaje de la Escritura, y nos impide concentrarnos sólo en los mensajes de la Escritura con cuales nos sentimos cómodos y evitamos así el reto que la oración trae basadas en las Escrituras.
Para el séptimo domingo después de Pentecostés
Año A (2016-2017)
Oración Centradora
Señor, escucha mis oraciones; Presta atención a mi petición, porque eres fiel; Responde en tu justicia (Salmo 143: 1). Espíritu de Cristo, eres mi esperanza a través del día, eres mi guardia durante la noche, mi compañero en el camino. Cristo estás siempre delante de mí, Cristo estás siempre detrás de mí, Cristo estás siempre dentro de mí (El Cántico de San Patricio). Amén.
Lunes 17 de julio de 2017 – Génesis 28: 10-19a
Oremos por aquellos que son vulnerables por su propio hacer que experimenten la bondad y la misericordia de Dios.
Martes, 18 de julio de 2017 – Salmo 139: 1-12, 23-24
Oremos por los que están huyendo o tratando de esconderse de Dios que se encuentren con Dios de maneras que seán guíados en un camino de regreso a Dios.
Miércoles 19 de julio de 2017 – Sabiduría de Salomón 12:13, 16-19
Oremos por aquellos que dudan de la plenitud del poder de Dios para que experimenten una nueva esperanza a través del perdón y la justicia tierna de Dios.
Jueves 20 de julio de 2017 – Isaías 44: 6-8
Oremos por aquellos que no han comprometido plenamente sus vidas a Dios como redentor y fundamento de su ser.
Viernes, 21 de julio de 2017 – Salmo 86: 11-17
Oremos por los perseguidos por su devoción a Dios para que experimenten el consuelo, la misericordia, la gracia salvadora y el favor de Dios.
Sábado 22 de julio de 2017 – Romanos 8: 12-25
Oremos por los cristianos nuevos y exploradores que aún no están seguros de su esperanza o identidad como un compañero heredero con Cristo y un hijo amado de Dios.
Domingo, 23 de julio de 2017 – Mateo 13: 24-30, 36-43
Oremos por aquellos que en su afán de separarse de los demás causan más daño que bien.
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